Todos somos muy conscientes de los beneficios de estar en forma, comer bien y hacer ejercicio. A veces nos esforzamos mucho en mejorar nuestra salud, nos apuntamos a un gimnasio, nos compramos una cinta de correr, alimentos orgánicos y productos naturales para la salud. Hacemos todo esto (o por lo menos lo intentamos) para nosotros mismos, pero… ¿Es posible que hayamos descuidado a nuestro perro? ¿Podríamos estar sobrealimentándolo? ¿Nos estamos olvidando de hacerlo caminar? Del mismo modo que el exceso de peso y la obesidad pueden tener efectos desastrosos sobre la salud humana, lo mismo se aplica a los perros. La obesidad puede derivar en una gran cantidad de riesgos y enfermedades: diabetes, enfermedades respiratorias, artritis, trastornos de las articulaciones, incluso problemas de comportamiento y reducción de la calidad de vida. Como los humanos, los perros no se convierten en obesos de la noche a la mañana. Por lo general, nuestro amigo peludo coge sobrepeso debido a al
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